Plegar, lijar, tumbar... sinónimos todos en el argot motero para referirse al hecho de sacarle brillo a las deslizaderas. Para los que no somos Valentino Rossi, lleva tiempo aprender a tumbar bien, pero cuando se logra, ¡qué pasada!
Colocadas en los pantalones del mono, las deslizaderas de rodilla son de las pocas cosas que nos gusta gastar cuanto antes mejor. Es un producto que, cuanto más usado está, más significa que te has divertido. Y, porqué no decirlo, también puedes presumir más. Aunque hay días que la pista no está para muchas alegrías, y la lluvia te impedirá inclinar tanto...pues prepara unas deslizaderas para agua .
Si hay algo que queda bien en las fotos es sacar chispas al rozar con el asfalto. Las deslizaderas para bota son un bendito elemento que nos salva de lanzar las botas al cubo de la basura tras cada tanda. Asegúrate de comprar las deslizaderas del mismo modelo de bota que tienes, ya que las marcas como Dainese, Alpinestar o Sidi, no las hacen universales.
Y como nos vienen demostrando los pilotos desde la época de Jean Philippe Ruggia hasta la actualidad con Marc Márquez, tocar con el codo es posible. Así que estate atento porque, quién sabe, quizá pronto tendremos las deslizaderas para codo también disponibles. Y no dudes que en Motocard seremos los primeros en ofrecértelas.